museos, a lo largo de su historia, han replanteado diversos aspectos sobre su quehacer. Uno de los cambios más significativos de los últimos años ha sido el centrar sus esfuerzos, diseños y propuestas en el público.
Para poder realizar ese tipo de actividades es fundamental considerar que la figura del "público general" no existe en total uniformidad, sino que está conformado por diversos grupos y comunidades, cada una con sus contextos, sus historias y sus intereses.
En esta diversidad de contextos se hace necesaria la creación de programas que atiendan específicamente a cada una de estas comunidades y considerar, a su vez, a aquellas que, por diversas situaciones económicas, de salud, por temas de discapacidad, etc., pudieran verse excluidas de las instituciones culturales.
Sobre este último punto es deber de los museos el crear alternativas para acercarse a estos públicos, ya sea acercando a la gente a la sede del museo o saliendo de sus muros para trabajar en los territorios de las comunidades, procurando convertirse en espacios donde estas últimas puedan ejercer sus derechos culturales. Esta nueva forma de pensar las actividades hace que los museos se conviertan en espacios más sociales.
En esta diversidad de contextos se hace necesaria la creación de programas que atiendan específicamente a cada una de estas comunidades y considerar, a su vez, a aquellas que, por diversas situaciones económicas, de salud, por temas de discapacidad, etc., pudieran verse excluidas de las instituciones culturales.
En el Museo UPAEP surgió un programa desde el año 2011 llamado “Arte y cultura para todos” el cual, en el espíritu de trabajar con, por y para las comunidades, se integra de varios proyectos, los cuales, con el paso de los años, han ido evolucionando y diversificándose.
Otra manera de reforzar las temáticas sociales desde los museos es a través de las mismas exposiciones, procurando abordar problemáticas que se encuentren afectando a dichas comunidades.
Estas acciones ayudarán a que los museos sean visibilizados como aliados en un trabajo conjunto para la consecución del Bien Común, al procurar que nadie quede fuera. Pero trabajar en verdadera colaboración con las comunidades implica una construcción compartida del museo, a través de metodologías de trabajo que permitan a las personas que las integran expresar sus intereses e inquietudes, siendo agentes activos en el proceso y no solamente receptores de las propuestas que el museo pueda diseñar.
¿Cómo trabajar entonces con las comunidades, para las comunidades?
En el Museo UPAEP surgió un programa desde el año 2011 llamado “Arte y cultura para todos” el cual, en el espíritu de trabajar con, por y para las comunidades, se integra de varios proyectos, los cuales, con el paso de los años, han ido evolucionando y diversificándose.
Para el caso del trabajo con adultos mayores, el Museo UPAEP generó un programa llamado Evocarte, con la intención de invitar a las personas adultas mayores a acercarse al Museo, creando así un espacio para aprender y convivir.
Para trabajar con personas con discapacidad se creó el programa “Juego y aprendo” el cual consiste en desarrollar visitas guiadas adaptadas para atender a los públicos con diversos tipos de discapacidad. En el caso de personas con discapacidad visual, surgieron actividades específicas como el taller de verano presencial “Arte y Braille” que se mantuvo activo durante la pandemia por Covid-19 como un programa quincenal en Facebook llamado “Arte y Braille para Todos''.
Para el caso de personas con discapacidad auditiva se impulsó la grabación de cuentos en Lengua de Señas Mexicanas, así como la inclusión de videos explicativos en Lengua de Señas Mexicanas para algunas exposiciones virtuales.
Otro programa que busca acercar la cultura a públicos que, por su situación de salud, no tienen las facilidades para salir y asistir a los museos, es Museo Hospitalario. En este programa se asiste a las instituciones como hospitales y asociaciones de apoyo, para implementar actividades culturales para niños y jóvenes en situación de hospitalización, así como sus familias. Durante la pandemia por Covid-19 el programa se mantuvo activo a través de cuadernillos de actividades que se obsequiaron a estas instituciones, al no poder ingresar con tanta facilidad para reducir riesgos de salud.
Estos ejemplos, y otros como el programa Resonancias para Personas con Alzheimer, Mi Museo en el Aula y Museo UPAEP en tu Escuela, deben ser alternativas creativas para atender a las diversas comunidades, en donde es importante considerar que nuestros públicos tienen ideas y experiencias previas al museo, y que en estas instituciones pueden encontrar lugares para compartir esas experiencias y para construir conocimientos y vivencias nuevas. Entre más participativos sean los programas, dando voz y poder de decisión a los visitantes, más relevantes seguirán siendo los Museos.
